Mi experiencia en el trabajo con adolescentes, en el curso que di en Diagrama y posteriormente los años que trabajé en Apimma, fue bonita y en algunos momentos, difícil.
No venían de forma voluntaria, lo que incrementaba la resistencia a recibir ayuda que ya de por sí suelen tener a estas edades. Creo que la frase que más oí en estos años fue “Yo no tengo ningún problema, el problema lo tienen los otros”.
Te ponen a prueba de diferentes maneras para ver si pueden confiar en ti; una vez conseguida su confianza el trabajo con ellos/as es más fácil.
Como ya os comenté en el artículo que publiqué hace poco sobre la psicología del adolescente, soy experta en terapia con adolescentes. Por lo que, si crees que puedes necesitar ayuda para tu hijo, o para ti mismo; ponte en contacto conmigo y concertamos una cita. ¡Estoy aquí para ayudarte!
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